Oliart
El PP pidió la semana pasada la dimisión de Alberto Oliart, presidente de RTVE, por supuesta manipulación en los informativos de la televisión pública. Y para ello, los populares utilizaron la omisión de noticias como la subida del recibo de la luz y otros asuntos, digamos, menores. Digamos. Bien, el caso es que casi nadie se ha hecho eco de esta protesta del PP porque en el fondo todos saben que es ridículo y forzada.
Creo que la que mejor lo explica, nuevamente, es Lucía Méndez, que escribe esto en el blog del Consejo Editorial de ELMUNDO.es
«La realidad es que Rajoy -él sabrá por qué- ha permitido a sus cachorros disparar contra Oliart pidiendo su dimisión. La realidad es que hay que tener muchas narices para considerar sectaria TVE existiendo Telemadrid o Canal Nou y con los antecedentes históricos del PP. La realidad es que los informativos de la televisión pública que dirige Fran Llorente son los menos gubernamentales de la historia.
La realidad es que en TVE hay pluralismo en la opinión. Qué le vamos a hacer, Zapatero se ha comportado con mayor respeto hacia los periodistas que Felipe González o José María Aznar. Los partidos políticos prefieren la propaganda a la información. Pero el PP tendría que ser un poco más sutil para que no se le note tanto. Aunque de momento prefiere hacer pinza con los sindicatos de la casa para ver si debilitan más la televisión pública y así se pueden seguir forrando las cadenas privadas, donde por cierto los trabajadores gozan de unas condiciones laborales envidiables».