El típico idiota de la clase
Ya he citado muchas veces aquí el blog que tiene el corresponsal de El Correo en Italia, Íñigo Domínguez. No se pierdan su última entrada a propósito de la «actuación» de Berlusconi en el G-20. La definición más precisa del primer ministro italiano, sobre todo en este tipo de saraos y cumbres, se la he escuchado en la radio a Carlos Carnicero: «Es el típico idiota de la clase en la universidad». O sea, aquel que es proclive a las bromas estúpidas, el que cuenta el peor chiste o el que siempre está dispuesto a hacer el tonto en las fotos. Lo malo es que este «idiota» acaba de fagocitar a todo el centro-derecha-extrema derecha de Italia (salvo la Liga Norte), controla todas las televisiones del país (incluidas las públicas) y presume de un índice de popularidad entre los italianos de casi el 67%.
Durante el Festival de Periodismo de Perugia, Ezio Mauro, director de La Repubblica, sostuvo: «La izquierda italiana es débil y ha errado mucho, pero sigue luchando con una mano atada a la espalda. Es una situación indecente, única en las democracias occidentales».
Y eso que es idiota.