Pérez Henares cierra la trilogía
La prehistoria es el marco donde se desarrolla la trama de la última novela de Chani. Y, de nuevo, como en sus volúmenes precedentes, Guadalajara y sus paisajes vuelven a tener un protagonismo capital. El propio autor señala que “es un libro muy en la naturaleza y en el paisaje y algunos podéis reconocer algunos parajes inmediatamente. Está la cueva de Nublares, que existe en la realidad y tiene un poblado paleolítico encima suya. Y existió el lugar “Peñas Rodadas”, ahora yacimiento arqueológico del Neolitico. Ambos lugares, asomándose al Arcilloso (Henares) se encuentran en el término municipal de Bujalaro (Guadalajara). Mi pueblo y provincia natales son escenario de buena parte de la obra. La Cueva del Oso y el Alto Rey, en Aldeanueva de Atienza, son junto a la laguna de Somolinos lugares de enorme trascendencia en el desarrollo narrativo, como también los son los ríos Sorbe, Bornova y Jarama”.
La novela indaga en la temática de los anteriores volúmenes del autor. Los hombres ya habían esclavizado la tierra y al hacerlo se habían esclavizado a ellos mismos. Pero algunos no querían dejar la sendas de la caza, los fuegos del viejo clan , los bosques de la libertad y el culto a la Diosa Madre. Los cazadores del Paleolítico veían como su mundo perecía ante el empuje de los que escarbaban la tierra y domesticaban animales, como sus costumbnres se quebraban y otros dioses sustituían a la Madre. La batalla resultaba inevitable y el ultimo cazador , el último del clan de Nublares, se vio obligado a huir tras haber matado. Y encontró a otros hombres que habían hecho de la violencia su vida y estaban abriendo en los albores de la humanidad el terrible sendero de la guerra. El aprendió el camino de la sangre y alcanzo un puesto de privilegio entre los merodeadores. En las tierras bajas, donde los hombres cultivan la tierra y pastorean ganados, su nombre se convirtió en el augurio de la desgracia, en el preludio de la muerte que llega. Con ellos recorrió una península de la montaña al mar , entre asaltos y saqueos pero también tropezando con las maravillas y descubrimiento de un mundo nuevo que nacía.
El último cazador es la novela que en los albores de la humanidad ahonda en la genética de la violencia, la dominación y el poder que han perseguido desde su origen a la raza humana. Pero también en su valentía, en su sacrificio y en su capacidad de ofrecer su vida por salvar a sus semejantes y a sus seres amados. Porque un día el temida enfrentarse a su propia horda para salvar a lo que queda de su gente y de su estirpe. Babelia, el suplemento literario de El País, ha dicho del libro que es “una obra bien escrita, con sentido del ritmo y la intriga aventurera”.
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El viaje a Tánger de Pablo Llorente
El poeta de Guadalajara publica un nuevo poemario donde plasma experiencias propias
El intelectual alcarreño y ex dirigente del PSOE provincial Pablo Llorente acaba de publicar su último poemario. Lleva por título Tánger y relata experiencias de un viaje reciente a esta ciudad marroquí, considerada la puerta de entrada a África. Es un pequeño librito de apenas una docena de páginas repletas de sensaciones, vivencias, olores e impresiones de su escapada a Tánger. Se trata de once composiciones, de distinto estilo métrico, que componen un cuadro fresco y vivo de esta importante ciudad. Llorente ausculta el mar, la costa, los cafés donde sirven té con menta, la “amabilidad de sus gentes” y los ferrys que llegan por el agua. Acompañando a cada poema, el autor ha querido completar los versos con fotografías de Tánger alusivas al tema de cada composición. Escribe: “En el horizonte, los montes de Tarifa, la anhelada España, al lado el primer mundo, ensueño de estas buenas gentes; el estrecho, siempre cambiante, en medio, con sus tritones, sirenas y delfines, que cerca y que lejos, tan ancho”.
Pablo Llorente (Guadalajara, 1944), licenciado en Ciencias Químicas, ha estado matriculado en nueve universidades. Está afiliado al PSOE desde 1976. Su género predilecto es la poesía. Hace un par de años publicó su primer poemario: Rápida caravana, un total de 31 composiciones en las que desgrana su pálpito durante los tres últimos años. “Rápida caravana” significó la presentación pública de su vena lírica, a la que continuó el poemario Tiempo Cautivo, donde anunciaba “experiencias reveladoras”.