«Cuando un alemán entra en un salón, hace una profunda reverencia y dice: ‘Mi nombre es ?’ (aquí el nombre del alemán). Yo también quiero presentarme a la manera alemana. Entrar en un periódico es para uno como entrar en el seno de una familia desconocida. Yo me encuentro muy cohibido al principio. No me atrevo a hacer chistes. La idea que yo les dé a ustedes será casi siempre una idea personal, y por eso necesito que ustedes me conozcan antes de entrar en tarea para que no me tomen nunca completamente en serio. Ni completamente en serio ni completamente en broma» (Julio Camba, ABC, 8-10-1913).
«Para hacer un buen reportaje hay que gastar el zapato«. (José Martí Gómez)
«Lo que más me ha enseñado la profesión es a no decir muchas de las cosas que sabes. Duele mucho aprender a callar, pero es cierto que un periodista vale más por lo que calla que por lo que cuenta». (Fernando Pastor, periodista alcarreño y redactor jefe de El Economista).
«A los periodistas la utilizacion del yo solo debería serles autorizada a partir de los setenta años, cuando se supone que ya tienen cosas verdaderamente importantes que contar» (Indro Montanelli)
«Nunca como ahora hemos vivido tan amenazados por la desinformación» (Günter Grass, Oviedo, 21-1-06).
«Uno no sabe ya distinguir entre lo verdaderamente importante y lo superfluo» (Claudio Magris, Oviedo, 21-1-06).
«Yo comparto la idea de Hannah Arendt de que no existe libertad de opinión si no se sabe mantener la diferencia entre hechos y opiniones. La libertad de opinión son discursos distintos sobre un mismo relato, no una infinidad de relatos sobre un mismo hecho.» (Alain Finkielkraut, El País, 18 de diciembre del 2005).
Sobre la llamada de un falso Zapatero, en realidad un humorista de la COPE, al presidente de Bolivia: «es un escándalo, una vergüenza: supone un menosprecio absoluto a la ética y la estética periodística», afirma. «Supone un escalón más en la debacle, y el hecho de que el Partido Popular utilice esa llamada para atacar al Gobierno es otro escalón más». Y concluye: «es una obscena escenificación de que el fin justifica los medios: la estupidez elevada al cubo». Arcadi Espada. 21-12-05.
«Miguel Delibes me consagró literariamente cuando una tarde me diera veinte duros por un artículo».
«Así como el columnista es un lujo de los periódicos, también es un poco la puta que se alquila por meses».
Francisco Umbral. Días felices en Argüelles, 2005.
«Una vieja y chusquera sentencia del oficio dice que los diarios se hacen, ¡chaval!, en las páginas que deja libre la propaganda. (…) Hay días que la información es solo propaganda y la propaganda solo información». Arcadi Espada, Diarios
«Por nada del mundo merece la pena arriesgar la vida». Francisco Peregil, corresponsal de guerra. Reportero en Bagdad, 2003.
«Hay bastantes periodistas mediáticos que hablan de sí mismos. Los protagonistas son las víctimas de la guerra y son los únicos que a mí me interesan». Gervasio Sánchez, Periodista Digital, 18-11-04