La Garlopa Diaria

4 marzo 2008

JOSÉ ANTONIO LABORDETA
Público 16.02.08


Está subiendo al punto de la ebullición el ambiente preelectoral de este país. El PSOE intenta desmarcarse de ese handicap terrible que siempre arrastra la izquierda: la abstención y el PP asegura sus votos sacando a la luz todo lo peor que, a través de los años, ha mostrado la derecha: el odio radical, el acabar con el contrario-enemigo y dejar el país, como siempre, huérfano de esperanzas y de ilusiones. Son como termitas destruyendo los pequeños pasos de libertad que aquí hemos ido ganando en contra de la adustez de Aznar, la estupidez de Cañete, elatalibanismo de Acebes, la autoridad de doña ESPE y la chulería de alguno de los otros. Sus antecedentes acabaron con la ilusión de una República a tiros; ahora intentan acabar con una Monarquía democrática, miserabilizando a todos, sacando a flote lo peor de cada uno de nosotros y hacer que ahora, tus vecinos, te miren sospechosamente. Se detesta a los homosexuales, se odia a los catalanes, se miserabiliza a los artistas, se destruye la imagen del País Vasco y se maldice la emigración de la que ellos se sirven mas que los demás. Durante ocho años he estado sentado en un escaño sin entender muy bien que era una peneele o una peele pero lo que si entendí, muy pronto, fue que el PP estaba bajo la batuta de unos seres que nos detestan a la mayoría de los españoles y que hasta que no llegó Zapatero, un agrio olor a desazón se hundía por todos los pasillos de la Cámara. Resumiendo: ¡Es tu voto el que hace falta! ¡No seas gilipollas, que ellos no faltan nunca!