14.10.07 – 21:39 h.
Me cuentan que el vicepresidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Fernando Lamata, ha estado este domingo en Santa María del Espino inaugurando un monolito en recuerdo de las víctimas del incendio y cursando un homenaje al único superviviente de aquel suceso, un vecino de Arcos de Jalón. Al parecer, además del vicepresidente, que no es moco de pavo, han acudido el consejero de Medio Ambiente (pero no Sergio, el delegado provincial), el delegado de la Junta, otros delegados provinciales y algún cargo más del Partido Socialista en Guadalajara. Me cuentan que sólo había familiares de dos víctimas, y por casualidad, así que en torno al oscurantismo del acto no podría alegarse que fue por las familias. Quizá por el homenajeado, Jesús Abad, pero tampoco se sabe.
Busco en la competencia a ver si hay algo. No encuentro nada. Busco en los despachos de las agencias. Tampoco. Busco en la página oficial de la Junta. Ni rastro. Nadie parece confirmar la noticia. Y a determinadas horas, en algunos momentos, en una redacción, uno se plantea muchas cosas.
En todo caso: ¿Qué clase de gobernantes regionales son aquellos que tienen que esconderse, y esconder toda su parafernalia política y mediática, para ofrecer un simple homenaje a las víctimas del incendio del Ducado? ¿Pero esto que es?