La Garlopa

El futuro de los castillos centró la I Jornada Cultural ‘Castillos de Guadalajara’ en Galve

LOS EXPERTOS JOSÉ LUIS GARCÍA DE PAZ, AMADOR RUIBAL Y LAURO OLMO COINCIDEN EN SEÑALAZAR LA NECESIDAD DE AUMENTAR LA SENSIBILIDAD Y LAS INVERSIONES EN PATRIMONIO

LA JORNADA CONGREGÓ A MÁS DE 200 PERSONAS A LO LARGO DEL DÍA EN EL AYUNTAMIENTO DE GALVE

Galve de Sorbe fue la localidad anfitriona de la I Jornada Cultural ‘Castillos de Guadalajara’, que se celebró el pasado sábado organizada por la Asociación Cultural ‘Castillo de Galve’, junto a la Diputación de Guadalajara, la Universidad de Alcalá y la Junta de Castilla-La Mancha, además de la colaboración del Ayuntamiento de Galve de Sorbe y la Asociación de Amigos de los Castillos de España. Durante la jornada, que contó con la asistencia de más de doscientas personas a lo largo del día, se analizó la situación actual de todos los castillos de la provincia, el tratamiento que reciben por parte de sus propietarios, sean particulares o una administración pública, y también se propusieron medidas para impulsar su conservación y restauración.

La jornada, celebrada en el Ayuntamiento de Galve de Sorbe, contó la animación de los dulzaineros Mirasierra y con una extraordinaria exposición de 30 fotografías procedentes de una muestra de los castillos de Guadalajara organizada por la Diputación Provincial y el CEFIHGU. El programa de la jornada incluyó tres ponencias por la mañana. El investigador José Luis García de Paz trazó un recorrido completo y virtual, apoyado en una presentación digital, por todos y cada uno de los castillos de Guadalajara. El vicepresidente de la Asociación de Amigos de los Castillos de España, Amador Ruibal, se detuvo en un tema espinoso: rehabilitación y restauración de inmuebles de Patrimonio Histórico. Por su parte, el director del parque arqueológico de Recópolis, Lauro Olmo, disertó sobre la explotación turística de edificios históricos, la utilización del patrimonio como medio de desarrollo socio-económico. Por la tarde, la teoría bajó a la tierra, a pie de obra, con la intervención de tres regidores municipales que han estado o siguen estando implicados en la rehabilitación de los castillos de sus respectivos pueblos. El alcalde de Zorita, Dionisio Muñoz, explicó cómo recuperó el Ayuntamiento que preside desde hace casi treinta años el castillo de la Orden de Calatrava. El ex alcalde de Pioz, Enrique Prat, detalló el complejo y largo proceso de expropiación iniciado en 1992 y que aún hoy no está del todo acabado. Y, finalmente, el ex alcalde de Jadraque, Faustino Lozano, describió todos los pasos seguidos en esta localidad para conseguir, a través de tres fases, la rehabilitación integral del castillo del Cid.

REACCIONES

ROSA MARÍA HERRERO, SECRETARIA ASOCIACIÓN CASTILLO DE GALVE:

“Estamos muy satisfechos, tanto de la participación de la gente, que ha llenado el salón del Ayuntamiento durante todo el día, como del altísimo nivel de los ponentes, que son todos destacados especialistas en el ámbito de los castillos a escala nacional. Hemos aportado nuestro granito de arena para que la voz de los castillos no se pueda silenciar”.

JULIÁN ESTEBAN, ALCALDE DE GALVE:

“El balance de la Jornada es muy positivo, la gente ha podido conocer de primera mano la riqueza patrimonial y turística que supone poseer un castillo y, por otra parte, ha comprobado la suerte que tenemos en Galve de tener un castillo del siglo XV, aunque hace falta tenerlo en mejor estado que ahora”.

JOSÉ LUIS GARCÍA DE PAZ, INVESTIGADOR:

“Guadalajara es la provincia con más fortificaciones, pero no es la más poblada ni es la más rica para mantenerlos. Los ríos han determinado la posición de los castillos y atalayas, entre ellos, el Sorbe y el Henares. Hay tres tipos de castillos: roqueros, adaptados a una peña, como el de Villel de Mesa o Zafra; sobre un cerro, como Jadraque o Galve; o en un llano, como los de Pioz o el Alcázar de Guadalajara capital. En un castillo se pueden hacer tres tipos de acciones: consolidar, restaurar y rehabilitar. De los 50 castillos que tiene Guadalajara, 20 están en buen estado y 35 permanecen en ruina de diverso grado. Los castillos más importantes son los de Sigüenza, Atienza, Palazuelos, Jadraque, Torija, Galve, Cifuentes, Hita, el castillo de la Luna de La Torresaviñán, el alcázar de Guadalajara, Brihuega, Pioz, Anguix, Zorita, Molina, Zafra, y Villel. Layna Serrano consideró que la torre del homenaje del castillo de Galve “es la más bella de todos los desmochados castillos de la provincia”.

AMADOR RUIBAL, VICEPRESIDENTE ASOCIACIÓN DE AMIGOS DE LOS CASTILLOS DE ESPAÑA:

“La época del desarrollo, en los años 60, fomentó una especulación inmobiliaria terrible que perjudicó al patrimonio. Los centros históricos fueron arrasados por la especulación. No hemos aprendido casi nada desde entonces, aunque en los últimos años la cosa ha cambiado. Pese a todo, los casos de abandono y ruina han proliferado. Es fundamental, antes de intervenir, una exploración arqueológica, lo que determina si vale la pena conservar o enterrar. Consolidar siempre merece la pena, restaurar depende de qué y cómo. El uso actual de los edificios depende de una utilidad práctica, tanto si es de particulares como del Estado: o para vivienda, sede cultural, centro de la tercera edad, hotel o centro de interpretación. El castillo es un señuelo que atrae el turismo y dinamiza la economía del territorio donde se asienta”.

LAURO OLMO, DIRECTOR DE RECÓPOLIS:

“Estoy particularmente feliz de estar en Galve y que en un pueblo de 143 habitantes censados haya casi cien personas en este salón un sábado soleado de verano. Diderot dijo que “hay que abrir al pueblo los palacios de la monarquía”. La gente tiene derecho a disfrutar del patrimonio, a su divulgación. Ahora existe una demanda de conocimiento, queremos saber de dónde venimos, de ahí el interés por los castillos o los parques arqueológicos. Estamos al mismo nivel que Italia, pero en España los monumentos y sus entornos están peor conservados y el número de visitas es menor. Son fundamentales, a la hora de actuar, los planes directores de patrimonio, planificar el futuro”.

DIONISIO MUÑOZ, ALCALDE DE ZORITA DE LOS CANES:

“El Ayuntamiento de Zorita recuperó en el año 2000 la titularidad del castillo comprándoselo a su dueño por una peseta. Además esta peseta nos la encontramos cerca del castillo, era de la época de Pedro I el Cruel. Hemos recibido una subvención a través del 1% Cultural, pero ahora tenemos peligro de derrumbe en algunos muros y he tenido que pedir la intervención de la Consejería de Cultura ante el peligro de desprendimiento”.

ENRIQUE PRAT, EX ALCALDE DE PIOZ:

“Un proceso de expropiación es largo, difícil y costoso. En Pioz comenzó en 1992 y puede acabar en 2010. Los propietarios buscaron un abogado experto en patrimonio y el Ayuntamiento tuvo que ponerse a la altura. Al final, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha pactó un justiprecio en torno a los cincuenta millones de pesetas. Luego tuvimos que hacer trabajos de excavación que yo mismo dirigí como alcalde. Nadie vino a ayudarnos. No había ningún interés por el castillo. Incluso algún concejal llegó a decirme que no merecía la pena seguir gastando ni un duro más en cuatro piedras mal amontonadas. El que se quedó de piedra fui yo al oír aquellas cosas. El proyecto integral de restauración cuesta 168 millones de pesetas”.

FAUSTINO LOZANO, EX ALCALDE DE JADRAQUE:

“El pueblo de Jadraque recuperó el castillo hace un siglo por 300 pesetas. A lo largo de este siglo ha sufrido distintas reconstrucciones que, al menos, han mantenido en pie al edificio. Durante la Guerra Civil se dañó gravemente e incluso en los años 50 se utilizó piedra machacada del castillo para hacer la carretera. Eran cosas de la época. En 2001 se redactó un proyecto de restauración a través de la Universidad de Alcalá. En 2004 recibimos una subvención de ADEL Sierra Norte de 210.000 euros. Luego tuvieron que coordinar la actuación interministerial para el 1% Cultural, y recibimos inversiones con cargo a esta partida, al cumplir todos los criterios exigidos. Ahora hay un plan de rehabilitación dividido en tres fases, cada una de 2,5 millones de presupuesto. La primera fase, en ejecución, pretende dejar visitable el castillo e incluso hacer un pequeño museo en el aljibe principal”.