Hay muchas maneras de envenenar a la opinión pública. Un portavoz de CiU dijo ayer, al terminar el discurso de investidura de Montilla, que «pareció el discurso de un presidente de diputación o de una comunidad autónoma». Lo dijo por el cambio que significa pasar de hablar de la nación a la educación, la sanidad o la vivienda. Pues bien, esta mañana, un locutor de radio -y no se trata del que todos pensamos- ha recogido estas palabras como si el portavoz de la coalición catalanista llamara «paletos» o «chusma» (palabras textuales del locutor andaluz recriado en Barcelona) al resto de presidenes regionales. No sé quiénes hacen más daño a la convivencia, si los nacionalistas que viven de la patria o los patriotas que viven del nacionalismo.