«Zapatero no está en La Moncloa porque le haya tocado el premio en una tómbola, sino porque ganó las elecciones. El debate sobre por qué las ganó o dejó de ganarlas es bastante inútil a estas alturas. Puede que el recuerdo del atentado del 11-M le haga alguna pupa al presidente del Gobierno, pero la memoria de aquellos terribles y dramáticos días le hace infinitamente más daño al PP» (Lucía Méndez, en El Mundo).